Hay por ahí una frase, o un dicho popular, que corre , como todas aquellas frases o dichos que no son apadrinados por un autor cierto, que "la confianza se gana en años y se pierde en un minuto".
Hoy nos sorprende la noticia de que la jueza Alaya ha impuesto una fianza altísima a la exministra socialista Alvarez... y enseguida todos los jerifaltes critican esta decisión y hablan de "causa general contra el PSOE"... y enseguida los contrarios critican a éste que critiquen la labor de aquella.
Hace ya unos días, quizás semanas, quizás meses que el juez Yanomeacuerdo, impuso una fianza millonaria a algún imputado de los muchos que tiene el PP... y enseguida todos sus jerifaltes criticaron esta decisión y hablaron de "causa general contra el PP"... y enseguida los contrarios criticaron a éste que criticaran la labor de aquél.
La historia siempre repetida del "ytumás" y de intentar arrimar la justicia a su propia sardina.
Ni unos ni otros, o todos ellos. Perdonen la comparación pero me recuerda un gran corral de gallinaceos y gallinaceas ( para no herir sensibililidades de género) en el que todos discuten, cacarean, se picotean y se denuncian por ver quien ha comido mas pienso ... y como todos los corrales, esto huele mal al ciudadano.
Ya pasó el minuto en que se perdió la confianza.
Con independencia de lo que en nuestro fuero interno podamos pensar ( y pienso que esta Jueza se ha pasado un poco tanto en la fianza como en el escarnio público anticipado a una presunta)¿No ha llegado el momento de dejar trabajar a la justicia, de verdad, sin criticas para que actúe contra los corruptos? ¿No es bueno que se señale a los corruptos con el justiciero dedo, para salvar a otros políticos honrados que todavía quedan?
Porque de lo contrario, el ciudadano hastiado, está ya a punto y abrirá una "causa general contra la política y los políticos" lo que pienso que tampoco es nada bueno. Repito: todavía quedan buenos y honrados políticos , del sentido o color que sea, que no tienen por qué estar inmersos en este escarnio generalizado.
Recuperar la confianza perdida. Este objetivo llevará años. Y para ello, pienso que lo mejor es dejar actuar a la Justicia;sin injerencias, sin criticas, con respeto real. Quedaros con la frase mágica: "No lo comparto pero lo respeto".
Respeto, confianza... ¡Ay, que palabras tan devaluadas!
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